Amor por EL artista. Muchas veces lleban a la obsesión, desencadenando una serie de conflictos a los cuales afecta la privacidad de aquel supuesto enamorado de uno, el artista en cuestión. Por qué llegar o caer en esa obsesión cuando no hay un motivo que lo fundamente. Cuál es la necesidad de causar disturbios en gasolinerias, amenazarlos, amenazar a la familia, causarles retrasar el lanzamiento de su nuevo disco, iniciarles cargos judiciales. No ganan nada de esa forma. Lo cómico es que se hacen llamar fanáticas cuando en realidad ni se asemejan a una de verdad. La verdadera fanática los apoya en todo, los sigue a donde sea. No les causa conflictos y mucho menos produce el stop de la grabación de su nuevo disco porque supuestamente si son fans como dicen ser, quieren su música y la apoyan. Entonces no lo son, solo falsas ''fanáticas'' y verdaderas obsesivas de poseerlos en todos sus aspectos. No llegan a comprender que el hecho de ser humano implica también tener privacidad.


